Drenaje Bronquial

Drenaje bronquial

10 de October del 2016

Fundamentos básicos

    El drenaje bronquial y los ejercicios respiratorios junto a las técnicas de readaptación al esfuerzo, relajación y obtención de una frecuencia respiratoria adecuada son parte integral de cualquier tratamiento en fisioterapia respiratoria.

    El drenaje bronquial es un medio físico que tiene por objeto:

Limpiar de secreciones excesivas los pasajes respiratorios.

Mejorar la ventilación alveolar.

Prevenir las complicaciones respiratorias debidas a la inmovilidad.

    Para realizar un drenaje bronquial es necesario colocar al individuo en una posición específica capaz de facilitar la progresión de las secreciones desde las ramificaciones segmentarias más pequeñas a las lobares, de éstas a los bronquios principales y a la tráquea, y desde aquí, finalmente al exterior.

    Pero tan necesario es realizar un buen drenaje bronquial como reforzar el diafragma y mejorar la movilidad de la pared torácica para conseguir la movilización de los tapones de moco que obstruyen a menudo la luz bronquial, favoreciendo la permeabilidad de las vías bronquiales.

    A veces la mucosidad forma verdaderos taponamientos que impiden o disminuyen significativa mente la correcta ventilación pulmonar.

    El DUE debe conocer los segmentos afectados, orientándose para ello por los resultados del examen clínico, de las radiografías y las broncoscopias.

    El DUE debe colocar entonces al paciente en la posición más exacta y apropiada que facilite el drenaje óptimo de los segmentos interesados.

    Sin embargo, el drenaje bronquial no se reduce simplemente a la colocación del paciente en una postura determinada, sino que engloba cinco técnicas complementarias que se usan de forma generalizada:

Posicionamiento.

Percusión.

Vibración.

Ventilación por segmentos.

Tos dirigida.

    El tratamiento más efectivo engloba estas cinco técnicas. Brevemente resumido diremos que después de situar al paciente en la posición idónea, se le indica que haga respiraciones pausadas prolongando cada fase espiratoria. Durante la espiración, el ATS/DUE aplica vibraciones sobre la zona del tórax que se está drenando, e intenta que la tos que se origina sea productiva, es decir, capaz de expulsar las secreciones bronquiales.

    El drenaje bronquial suele llevarse a cabo tras aplicar una aerosolterapia a presión positiva intermitente con suero fisiológico, broncodilatadores y algún mucolítico o atomizador bronquial ultrasónico, que facilite la fluidificación de las secreciones.

    El tratamiento se finaliza siempre con un drenaje completo del lado sano, evitando una posible diseminación secundaria.

Indicaciones. Contraindicaciones.

Riesgos del drenaje bronquial

Indicaciones del drenaje bronquial:

Bronquiectasia.

Síndrome de inmovilidad de los cilios (Kartagener).

Denervación pulmonar.

Pacientes débiles.

Pacientes que muevan flujos bajos.

Pacientes neurológicos.

Pacientes en UCI.

Pacientes no colaboradores en otras técnicas.

Contraindicaciones:

Hipertensión craneana, edema cerebral.

Cardiopatías agudas o crónicas.

Ascitis importante.

Inestabilidad hemodinámica.

Volet torácico.

Pacientes con aumento de disnea o aumento de trabajo respiratorio.

Pacientes hipóxicos.

Pacientes hipercápnicos.

Efectos secundarios:

Arritmias.

Elevación discreta de la presión craneana.

Desaturación franca de O2.

Disnea.

Posicionamiento para el drenaje bronquial

    El hecho de colocar al paciente en una posición determinada y no otra se basa tanto en la estructura anatómica del árbol bronquial como en la acción de la gravedad.

Existe una posición diferente para drenar cada segmento pulmonar:

Drenaje del segmento apical del lóbulo superior

    Este segmento está situado en la zona supra e infraclavicular. Está ventilado por el bronquio apical superior.

 

La posición de drenaje es en sedestación, con el tronco enderezado y las piernas semiflexionadas con un almohadón debajo de las rodillas.

Según la localización de la lesión se puede imprimir al paciente una inclinación hacia delante, atrás, o a un lado.

    La vibración se realiza en la zona situada entre la clavícula y la región supraespinosa de la escápula.



Drenaje del segmento anterior del lóbulo superior

    Este segmento se localiza en la zona torácica situada entre el borde del esternón y la línea axilar media, entre el segundo, tercero y cuarto espacio intercostal. Está ventilado por la ramificación anterior del bronquio lobar superior.

 

 

 La posición de drenaje es en decúbito supino, con una almohada bajo la cabeza y otra debajo del hombro del lado del segmento a drenar, con objeto de hacer girar el tórax. Las piernas se mantienen flexionadas por medio de una almohada.

    La zona de vibración se sitúa entre la clavícula y la línea media intermamilar.



Drenaje del segmento posterior del lóbulo superior

 

 Este segmento está situado por detrás, a la altura de la región supraespinosa. Por abajo se apoya sobre la gran cisura, a nivel de la cuarta costilla.

La ventilación viene dada por la ramificación posterior del bronquio lobar superior.

La posición de drenaje es en sedestación, con el tórax inclinado hacia delante y ligeramente girado hacia el lado contrario del pulmón donde tenemos el segmento a drenar, colocando para ello una almohada bajo el brazo del mismo lado a tratar. Otra almohada la situaremos bajo las rodillas.

La vibración se realiza sobre la parte superior de la espalda, en el hemitórax elevado.



Drenaje del segmento lateral del lóbulo superior

Este segmento está situado en la región axilar. Su ventilación viene dada por la ramificación lateral del bronquio lobar superior.

 

La posición de drenaje es en decúbito lateral derecho para el lado izquierdo e izquierdo para el derecho, con una almohada bajo el hemitórax apoyado, por comodidad para el paciente. En los decúbitos laterales la pierna de abajo está flexionada, aportando estabilidad al paciente, y la de arriba semiflexionada.

    La vibración se lleva a cabo en la zona costal media, justo en la región torácica próxima a la axila.



Drenaje del segmento anterior (medial) del lóbulo medio en el lado derecho y de la língula en el lado izquierdo

    Este segmento está situado sobre los dos tercios inferiores de la región mamaria. El lado derecho está ventilado por la ramificación anterior del bronquio lobar medio.

 

  El lado izquierdo está ventilado por la ramificación superior del bronquio de la língula.

La posición de drenaje es:

Para el lóbulo medio: decúbito laterodorsal izquierdo, colocando una almohada debajo del hombro derecho.

Para la língula: decúbito laterodorsal derecho, con la almohada debajo del hombro izquierdo.

    En ambos casos las rodillas están ligeramente flexionadas. El pie de la cama se eleva unos treinta centímetros.

    La zona de vibración es a nivel de la línea media intermamilar correspondiente, derecha o izquierda.

Drenaje del segmento anterior del lóbulo inferior

    Este segmento está situado en la región submamaria, a la altura de la quinta costilla, entre la línea paraesternal y la línea axilar media.

    Está ventilado por la ramificación anterior del bronquio lobar inferior.

    La posición de drenaje es en decúbito supino con el pie de la cama elevado unos cuarenta centímetros. Las almohadas consiguen mantener las rodillas y las caderas flexionadas y la cabeza y el cuello cómodos.

    La zona de vibración se sitúa sobre las costillas inferiores, por debajo de la axila.

 

Drenaje del segmento lateral del lóbulo inferior

  Este segmento está situado en la línea media axilar, a la altura de quinta o sexta costilla.

    Está ventilado por la ramificación lateral del bronquio lobar inferior.

    La posición de drenaje es en decúbito contra lateral aliado que queremos drenar, lateral izquierdo para el lado derecho y lateral derecho para el izquierdo, elevando unos treinta centímetros el pie de la cama y con una almohada bajo el costado.

    La vibración se lleva a cabo en la parrilla costal inferior.

Drenaje del segmento apical inferior o de Nelson

    Este segmento está situado en la parte posterior, en la región interescapulovertebral situada a la altura de la zona infraespinosa. Está ventilado por el bronquio apical inferior o de Nelson.

    La posición de drenaje es en decúbito prono, con una almohada bajo el abdomen con la intención de corregir la lordosis lumbar y elevar el segmento apical del lóbulo inferior.

    La zona de vibración se localiza sobre la región interescapulovertebral.

Drenaje del segmento posterior del lóbulo inferior

    Este segmento está situado en la región basal posterior. Está ventilado por el bronquio posterior del lóbulo inferior.

    La posición de drenaje puede ser en decúbito prono, con una almohada bajo las caderas y el pie de la cama elevado unos treinta centímetros, o bien en decúbito prono con el tórax inclinado hacia abajo y los brazos apoyados en una pequeña silla más baja que el plano de la cama, posición que a veces no es posible por la incomodidad.

    La vibración se realiza sobre las costillas inferiores, a nivel paravertebral, sobre ambos hemitórax.

 

Cuando el drenaje postural no produce una expulsión adecuada de las secreciones pondremos al individuo en la posición más similar posible a la que debería adoptar para facilitar el drenaje. Debemos recordar que la expulsión de las secreciones no se obtiene sólo con la posición, si no que es necesario la vibración, la ventilación por segmentos y la tos dirigida.

    Por razones evidentes, debido a la agitación que provoca la vibración, y al esfuerzo de expectoración, el tiempo de cada posición no debe exceder de 5 a 6 minutos como máximo.

    La duración completa del drenaje es variada, suele durar entre 15 y 30 minutos cada sesión.

    Las sesiones se pueden repetir varias veces al día, hasta cuatro veces como máximo.

    Es preferible que se hagan antes de las comidas, aunque no justo antes.

Consideraciones del drenaje bronquial

    A la hora de realizar un drenaje bronquial hay una serie de aspectos que no deben pasarse por alto:

Los cambios fisiológicos que se obtienen en la oxigenación. La oxigenación disminuye cuando el sujeto se apoya sobre el lado sano. Es recomendable drenar el pulmón sano al final de cada sesión, por si han caído mucosidades en él durante el drenaje del lado enfermo.

Hay que observar la presión parcial de oxígeno {pOJ.

Hay que tener en cuenta:

La hipertensión pulmonar.

La hipertensión craneal en posición de trendelenbürg.

La hipo e hipertensión arterial.

La hipertermia.

Hay que considerar:

Las arritmias.

El edema pulmonar y el edema cerebral.

El derrame pleural masivo.

La tuberculosis activa (no hacer nada).

No utilizar la posición de trendelenbürg en pacientes:

Neurológicos.

Cardiacos.

Enfisematosos.

    Cada paciente merece un programa de tratamiento a medida, que se ajuste a sus necesidades. El diseño de dicho programa debe tener en cuenta:

La cantidad y viscosidad de las secreciones bronquiales.

El nivel de actividad del paciente.

    El proceso mismo de la enfermedad que padece.